El RC Celta recibió este miércoles en A Sede a directivos y plantilla del Celta Zorka y le brindó un merecido homenaje por una temporada magnífica en la que, por segunda vez consecutiva, rozaron el ascenso a la máxima categoría del baloncesto femenino.
El Celta Zorka finalizó la competición regular en el primer puesto de su división con un balance de 24 victorias y sólo dos derrotas. En la fase final, las celestes se esforzaron al máximo y compitieron con entusiasmo, pero cayeron ante un equipo con un enorme potencial, el Campus Promete.
El presidente del RC Celta, Carlos Mouriño, y su homólogo del Celta Baloncesto, Carlos Álvarez, se intercambiaron las camisetas de ambos clubs para conmemorar este encuentro entre dos de las instituciones más importantes del deporte vigués.